Una tormenta eléctrica desató cinco focos de incendio en la cordillera

Regionales.
Brigadistas del plan provincial de Manejo del Fuego y bomberos voluntarios combatieron los frentes que se desataron en cercanías a Junín de los Andes, Moquehue y Aluminé.

El Año Nuevo llegó con bastante trabajo para los brigadistas del plan provincial de Manejo del Fuego y bomberos voluntarios de numerosas localidades del sur neuquino. A lo largo de la cordillera, un frente de tormenta “seca”, es decir sin lluvia pero numerosa actividad eléctrica, desató al menos cinco focos de incendio.
Los más complicados se presentaron en el Lote 39 de Corporación Forestal Neuquina (Corfone), en cercanías a Aluminé, donde hay una plantación de tres mil hectáreas.
“Por ahora no afecta a las araucarias. Estamos esperanzados en que llueva porque hay personal que está arribando al lugar, que es de difícil acceso porque es alta cordillera”, contó a LM Neuquén el secretario de Desarrollo Territoria y Ambiente, Jorge Lara.
El segundo frente más complicado, principalmente por la dificultad de acceso, es en la zona de la estancia Santa Isabel, próximo a El Salitral ubicado en la Ruta Nacional 40, entre Junín de los Andes y Zapala. En este caso se trata de pastizales.
“El pronóstico brindado por la AIC anuncia chaparrones para la tarde noche de este domingo”, indicó Lara. Justamente el trabajo mancomunado de los brigadistas y el aporte de la lluvia permitió controlar el foco que se registraba en la zona de Moquehue.

En proximidades a Junín de los Andes, en tanto, se registraban otros dos incendios forestales. En el paraje El Contra y en la estancia Sihuen.
Según indicó Lara a LMN en el lugar trabajaba un avión hidrante y un helicóptero pero las malas condiciones climáticas, por la actividad eléctrica, interrumpieron esos labores.

En total más de 150 personas, entre brigadistas, bomberos voluntarios y equipos de apoyo trabajaban este 1° de enero en el combate de los incendios forestales en el corredor cordillerano.