Hallaron muerto al hombre buscado y detuvieron a un hijo por los tres asesinatos
De acuerdo al fiscal Jonatan Robert, un familiar le prestó al principal sospechoso una carabina el día del hecho, por lo que “puede dar cuenta de una premeditación”. Hasta ahora se desconoce el móvil del crimen.
El hijo del hombre que era buscado como principal sospechoso del doble crimen ocurrido en una estancia del partido bonaerense de Chascomús el viernes pasado fue detenido como acusado de los homicidios, luego de que hallaran el cadáver baleado de su padre dentro del mismo campo y que diversas pruebas lo vincularan a los hechos, informaron fuentes judiciales y policiales.
El sospechoso fue identificado como Francisco Waldemar Reddy, oficial de la Policía bonaerense e hijo de Diego Reddy (44), y era indagado por el fiscal de la causa, en principio por los crímenes de la pareja de su padre, María Eugenia Suárez (46) y de su hermanastro, Ignacio Reddy (12).
Es que el fiscal Jonatan Robert, a cargo de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) 10 descentralizada de Chascomús, aguardaba el resultado de la autopsia al cuerpo del padre del joven, para luego formalizar una ampliación de la indagatoria e imputarle también ese homicidio agravado.
Voceros judiciales y policiales informaron a Télam que los investigadores comenzaron a sospechar del joven de 20 años cuando al declarar como testigo se contradijo en la suma de dinero que supuestamente se había llevado su padre luego de cometer los asesinatos, ya que un principio mencionó la cifra de 9 millones de pesos y luego la redujo a 4.
Asimismo, el domingo se había peritado una camioneta Chevrolet S10 blanca, de doble cabina, que pertenecía a Francisco y en cuyo interior se incautó una carabina del mismo calibre que fue utilizada para dar muerte a Suárez y a su hijo, por lo que los investigadores procuraban establecer si el arma secuestrada fue la utilizada para cometer los crímenes.
Cámaras de seguridad
Mientras que una cámara cercana al campo denominado “Los Pinos”, situado sobre el kilómetro 129 de la Autovía 2, en Chascomús, captó el momento en el que se ve ingresar a Francisco a la estancia, y luego su retirada.
Al respecto, el fiscal Robert dijo al canal de noticias C5N que “a las 17.31 la cámara toma la salida de la camioneta Chevrolet S10 (adquirida por el imputado días atrás) con sentido a la ruta 2; 17.59 la cámara toma ingresando la camioneta, con sentido al campo, y la vuelve a tomar 19.43, que es cuando la camioneta egresa nuevamente hacia la ruta 2 y no vuelve a ingresar más”.
Para Robert, en ese rango de tiempo, del pasado viernes 29 de diciembre, se produjo el triple crimen, ya que “hay dos empleados que estaban trabajando esa tarde en el establecimiento rural, que en el horario aproximado a las 18.30 les parece haber escuchado un estruendo similar a un disparo de arma de fuego”.
“Después, con el trabajo que realizamos en el lugar de los hechos junto con personal de Policía Científica, relevamos rastros de origen dactilar, que luego fueron peritados y pertenecían al imputado. Esos rastros estaban en la camioneta familiar que estaba ubicada en el galpón que fue una de las escenas de los hechos”, afirmó el fiscal.
Luego añadió que solicitaron “la apertura de antenas para ver los movimientos de los teléfonos celulares del grupo familiar y el teléfono celular de Francisco Reddy tenía activación en la antena del kilómetro 139 de la ciudad de Chascomús, es decir ahí cerquita nomás del campo”.
Pidió una carabina a un familiar
Por otro lado, el representante del Ministerio Público Fiscal (MPF) contó que un familiar del acusado declaró como testigo que “le había prestado una carabina al imputado el día del hecho en horas del mediodía”, ya que la necesitaba “para ir a cazar”, lo que “eventualmente puede dar cuenta de una premeditación”.
Mientras que fuentes policiales informaron que el sábado por la noche el joven denunció que había recibido una llamada extorsiva en la que le exigieron dinero “para que no le suceda lo mismo que a su padre”.
Esto fue desmentido posteriormente por conocidos a quien Francisco les habría solicitado que realizaran las llamadas extorsivas.
Con las pruebas recolectadas, el fiscal Robert dispuso ayer por la tarde la detención del joven por los crímenes de Suárez y de su hijo de 12 años, avalada por el juez de Garantías interviniente, informaron las fuentes consultadas.
En esas circunstancias, y mientras los efectivos profundizaban los rastrillajes para localizar a Diego Reddy, finalmente hallaron su cuerpo, que presentaba al menos una herida de arma de fuego, en una zona de pastizales del mismo campo, a unos 250 metros de la casa donde se encontraron los cadáveres de su pareja y de su otro hijo.
El cuerpo del hombre fue retirado y llevado a la morgue judicial para realizar la autopsia, mientras que los expertos de la Policía Científica realizaron los peritajes correspondientes en la escena del crimen.
En tanto, el acusado fue trasladado desde la sede de la Subdelegación Departamental de Investigaciones (Sub DDI) Chascomús, donde pasó la noche, hacia la fiscalía de esa ciudad, para reunirse con su defensor oficial.
La indagatoria
Mientras que este lunes al mediodía el fiscal Robert comenzaba a indagarlo como imputado de los delitos de “homicidio calificado por alevosía en concurso ideal con homicidio simple”, en perjuicio de la pareja de su padre y de su hermanastro.
El funcionario judicial contó además que el acusado es “efectivo policial, pero habría tenido algún accidente, motivo por el cual estaba con tareas diferenciadas”, y que, al momento de tomarle declaración testimonial, al comienzo de la investigación, “muy tranquilo estaba”.
Por otro lado, añadió que aún quedan pendientes, entre otras medidas de prueba, las pericias balísticas y la de dermotest (para determinar la presencia de restos de deflagración de pólvora en sus manos).
El crimen de Suárez y de su hijo Ignacio Reddy se descubrió el viernes por la noche, luego de que efectivos policiales acudieron al lugar tras un llamado al 911 el administrador del campo que alertó acerca del fallecimiento de la mujer.
Una vez dentro de la estancia, los agentes hallaron el cuerpo de Suárez en la cocina, mientras que su hijo se encontraba gravemente herido en un galpón, ambos como consecuencia de disparos de arma de fuego.
El niño de 12 años fue trasladado de urgencia al hospital San Vicente de Paul, donde fue operado, pero finalmente falleció a raíz de las heridas de bala que sufrió.
Fuente: Télam