Desarrollan aislantes térmicos a partir del descarte de lana de oveja

Como resultado de una articulación público-privada, la empresa Aislana —San Luis— utiliza descartes de lana ovina como aislantes térmicos de alta eficiencia. Se trata de una tecnología desarrollada por el INTA y es una alternativa a los materiales sintéticos tradicionales.
Además de su uso convencional en la industria textil, la lana ovina posee propiedades físico-químicas que la posicionan como un material con alto potencial para aplicaciones no textiles. Su capacidad aislante, resiliencia y disponibilidad la hacen apta para el desarrollo de subproductos con valor agregado.
En este contexto, el INTA desarrolló una tecnología orientada al aprovechamiento de lanas gruesas, típicamente descartadas por el mercado y promovió su transferencia a la empresa Aislana para su implementación industrial. Este trabajo conjunto entre el sistema científico-tecnológico y el sector productivo permitió escalar una solución, que no solo sustituye materiales de origen fósil o mineral, sino que también genera nuevas oportunidades económicas para los productores laneros de la región.

Lucas Zanovello, investigador del INTA Patagonia Norte, que trabaja en agricultura de pequeña escala y producciones regionales, destacó: “El aporte de este desarrollo radica en que, en nuestro país, no existían aislantes a nivel comercial que reemplazaran materiales de base fósil o mineral con alto aporte energético. Con esta tecnología, los productores laneros lograron valorizar un recurso que hasta entonces era desechado o incinerado, comprobando que tenía un valor diferencial en el mercado, lo que incentivó incluso el aumento de las majadas”.
Desde su formulación, el INTA promovió un enfoque basado en energías renovables y procesos de bajo impacto, optimizando el tratamiento del descarte lanero e integrándolo en sistemas de construcción eficiente. El resultado es un aislante térmico con un proceso productivo adaptable a diferentes escalas.
Por su parte, Javier Dupuy, representante de Aislana, indicó: “Esta tecnología evidencia el potencial que posee este subproducto”. Asimismo, subrayó la importancia de continuar mejorando los procesos industriales: “La automatización es clave para incrementar la capacidad de producción y consolidar esta alternativa en el mercado de la construcción”.

Fuente: Prensa INTA